03
Enero
En muchas ocasiones en una rinoplastia vamos a utilizar injertos. En ocasiones, con motivo de una finalidad estética y, otras para restaurar la función nasal y conseguir una buena respiración.
El injerto es un método quirúrgico de propagación de tejido humano trasladando una parte del cuerpo a otra. Para implantarlo lo ideal es tomar el material del propio paciente. Lo más habitual es utilizar cartílago o hueso del tabique nasal, cartílago de la oreja (concha auricular), cartílago de costilla, o cresta del hueso coxal.
Los tipos de injertos empleados en la rinoplastia son:
1. Injerto en poste o “strut”:
Se coloca entre las pars medialis de la punta nasal para aumentar la proyección (altura) de la misma, darle estabilidad y conseguir una forma correcta de la columela.
2. Injerto en escudo (shield graft):
Se coloca en la punta nasal para darle mas proyección, habitualmente se precisa una vía abierta para situarlo y suturarlo a las cúpulas de los cartílagos alares.
3. Injerto en larguero. (batten graft):
Se utiliza en el caso de que pueda producirse una “nariz pinzada”. Durante una cirugía nasal, cuando el paciente no tiene suficiente válvula nasal si se quita demasiado el cartílago alar, éste puede colapsarse y hundirse, por lo que es conveniente realizar un injerto en larguero ya que sino se produciría insuficiencia respiratoria nasal.
Mediante una rinoplastia abierta colocaremos una tira de cartílago entre el vértice de las cúpulas de los cartílagos alares y el orificio piriforme.
4. Injerto expansor (Spreader graft):
Consiste en una tira de cartílago que situaremos entre el septum y los cartílagos superiores de la nariz con lo que vamos a ensanchar esta zona.
Habitualmente, se utilizan dos tiras una a cada lado, aumentando el espacio para que pase el aire. Además, así se consigue enderezar el dorso cartilaginoso y ensancharlo.
5. Injerto en mariposa (Butterfly graft):
Se suele obtener de la concha auricular y lo vamos a utilizar para rellenar los defectos del dorso cartilaginoso. Al tener una forna curvada se adapta muy bien a esta zona y si el defecto es mayor podemos colocar dos cartílagos uno encima del otro.
6. Injerto de cartílago en dados (diced cartilage graft):
En este caso el cartílago que hayamos obtenido lo cortaremos en pequeños dados los cuales introduciremos en una bolsa hecha con fascia del musculo temporal. Se utiliza para casos de nariz en silla de montar, para rellenar el defecto cuando éste afecta al dorso óseo y cartilaginoso.
7. Injerto de fascia del músculo temporal:
Se emplea para casos en los que haya una irregularidad en el dorso y conseguir que éste tenga un perfil recto y uniforme.
No obstante, será siempre el cirujano especialista de rinoplastia decidirá el mejor injerto para tu tratamiento. Por lo que deja que sea éste el que te comente lo que te conviene.